Alta Gracia, una ciudad patrimonio
La ciudad de Alta Gracia es la cabecera del departamento Santa María y es uno de los destinos turísticos más próximos a la ciudad de Córdoba. Como gran atractivo, en pleno centro histórico se encuentra una de las cinco Estancias Jesuíticas declaradas Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO.
Está a 36 Km. al sudoeste de la capital provincial, en el amplio Valle de Paravachasca. La ciudad, de unos 50 000 habitantes, posee un gran patrimonio arquitectónico, ya que en su área central se encuentra el casco de una antigua estancia jesuítica.
Dentro de la ciudad se puede apreciar una innumerable cantidad de edificaciones y huellas del pasado jesuítico como la Iglesia principal de la ciudad, la Residencia (hoy museo del Virrey Liniers), el Tajamar, la Hornilla y los Paredones.
Otros importantes sitios históricos para recorrer son El museo del Che Guevara, la casa de Manuel de Falla, la Gruta de Nuestra Señora de Lourdes, la vieja estación de trenes y la identidad de una ciudad con una extensa y colorida historia.
Por su parte, entre las diversas postas religiosas presentes, aparece la Gruta de la Virgen de Lourdes rodeada de naturaleza y mucha paz, y en frente a la plaza principal la Iglesia Nuestra Señora de la Merced, entre otros santuarios y capillas.
En la escapada, no pueden faltar otros espacios de valor histórico y cultural. Uno de ellos rescata el pasado arqueológico de la localidad, en otro se aprecian obras de arte de un escultor francés y otro rememora la vida de un compositor español. También se encuentra el reconocido Museo Casa del Che entre las propuestas.
Alta Gracia es reconocida además para disfrutar todo el año entre sus celebraciones. Está el Festival Gastronómico Peperina; el de food track, Mionca y el tradicional Encuentro Anual de Colectividades, uno de los eventos más importantes de la zona.
La casa del “Che”
El recorrido por las salas sigue la cronología de su vida, destacando a aquellas personas que lo marcaron y que lo fueron moldeando desde muy niño. La aristocrática familia Guevara era afecta a la fotografía y la gran generosidad de imágenes deja plasmada a la perfección las distintas épocas. Reuniones hogareñas, encuentros con amigos de la escuela o del barrio y sus andanzas sobre la bicicleta o la moto.
Afecto a la lectura, dejó gran cantidad de correspondencia y documentación que demuestran la sensibilidad, generosidad y amplitud social que el Che manifestara desde su primera infancia.
Luego de once años de vivir en Alta Gracia, estudió en un colegio secundario en la ciudad de Córdoba y posteriormente se trasladó a Buenos Aires para iniciar su carrera de Medicina.
El museo conserva crónicas de su vida familiar junto a su segunda esposa e hijos y de infinidad de viajes políticos y conferencias realizadas como embajador de Cuba para establecer lazos políticos y comerciales. La carta a Fidel Castro en la que renuncia a sus cargos es fiel reflejo de su espíritu de lucha.